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El mural

SOBRE EL MURAL

Título del mural: Enfermera de Mokotów del Levantamiento de Varsovia
Autor: Bartosz Podlewski, Bakcyl Studio

Gracias por detenerte a observar este mural y aprender más sobre este lugar excepcional.
Magdalena Baumann, coordinadora del proyecto Syrena Invest, 1 de julio de 2024

El mural en la fachada del edificio Racławicka 7 muestra la imagen de una enfermera de los batallones de Mokotów del Levantamiento de Varsovia. La paleta de colores está en tonos sepia y armoniza con la fachada, mientras que la simbología de los colores blanco y rojo es visible en el contraste entre la piel y los labios de la enfermera. La silueta se asemeja a la forma del distrito de Mokotów, subrayando los eventos que han dejado una profunda huella en la historia de Varsovia.

Desde el 1 de agosto de 1944, las unidades insurgentes del Ejército Nacional, como «Baszta» y «Waligóra», junto con los scouts de los batallones Szare Szeregi y la población civil, lucharon con gran determinación hasta casi el final de la insurrección. Después del asalto general de los alemanes a Mokotów en el día 58, el 27 de septiembre, el distrito capituló. En el área defendida por los insurgentes de Mokotów operaban hospitales y numerosos puntos de primeros auxilios y atención médica.

PERSPECTIVA DEL AUTOR

La idea de un mural sobre las enfermeras del Levantamiento de Varsovia me pareció intrigante y necesaria desde el principio. Hasta ahora, los monumentos conmemorativos, como el Monumento al Levantamiento de Varsovia en la Plaza Krasińskich, solo representan figuras masculinas, e incluso infantiles, como el Monumento al Pequeño Insurgente en Podwale. Esto podría dar la impresión errónea de que las mujeres no estuvieron presentes en la insurrección o que su papel fue tan marginal que no merecía ser recordado. Sin embargo, según estimaciones, había unas 12,000 mujeres, principalmente enfermeras y mensajeras, pero también aquellas que construían barricadas, rescataban personas de los escombros y luchaban con armas. Demostraron una enorme valentía y determinación en la lucha por la libertad, la familia y sus seres queridos, y por su amada ciudad. Recordar a todas las participantes del levantamiento en Mokotów sería imposible. Por eso, decidí crear una imagen universal de una sola mujer, representante de las enfermeras, para rendirles homenaje.
Bartosz Podlewski, Bakcyl Studio
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ENFERMERAS INSURGENTES DE MOKOTÓW

Salvar la vida y la salud de los soldados del Ejército Nacional y los residentes de Varsovia fue la tarea más importante del Servicio de Salud en la clandestinidad y durante el Levantamiento de Varsovia. Las enfermeras, jóvenes de diferentes edades, que sacrificaron sus propias vidas para ayudar a los heridos y enfermos, jugaron un papel fundamental.

En septiembre de 1944, los puntos sanitarios y hospitales en Mokotów lidiaban con un número creciente de pacientes heridos por bombardeos y artillería. Las enfermeras también ayudaron a los soldados heridos que pasaban por los canales hacia el centro de la ciudad antes de la capitulación de Mokotów. Algunas estuvieron con ellos hasta el final, pagando el precio más alto.

Un ejemplo es la comandante del servicio sanitario de la compañía O-2 «Misiewicza» del Regimiento AK «Baszta», Ewa Matuszewska «Mewa», quien fue fusilada el 26 de septiembre de 1944 por los alemanes en Aleja Niepodległości 117/119. Fue galardonada póstumamente con la Orden Virtuti Militari por este acto.

Entre muchas enfermeras de Mokotów, se destaca a Maria Chytrowska «Myszka», quien brindó asistencia a los heridos en el punto sanitario en la calle Kielecka 46 y luego en el Hospital de Campaña en Malczewskiego 16 y 18, así como a Stanisława Olędzka «Sława», quien trabajaba en Szustra 49.

Es importante recordar que donde se realizaban operaciones y tratamientos, también caían bombas, enterrando simultáneamente al personal médico y a los heridos. Después de la capitulación de Mokotów el 27 de septiembre de 1944, muchas enfermeras continuaron su servicio en campos de prisioneros o ayudando a la población civil a sobrevivir.

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CAPACITACIÓN DE ENFERMERAS

Para prepararse para el papel de enfermera, las mujeres pasaban cursos organizados por la Cruz Roja Polaca y la Escuela de Enfermería de Varsovia. Las más jóvenes obtenían la habilidad de primeros auxilios en la Asociación de Scouts de Polonia, donde aprendían disciplina, honestidad y perseverancia.

El primer examen real llegó durante la defensa de Varsovia en los puntos sanitarios y hospitales en septiembre de 1939. Durante la ocupación alemana, enfermeras voluntarias y monjas de diferentes órdenes, actuando en la clandestinidad, continuaron su formación en cursos secretos, incluidos los organizados por la Escuela Privada de Formación Profesional para el Personal Auxiliar de Salud de Varsovia del Dr. Jan Zaorski. Realizaban prácticas en hospitales de Varsovia y asistían a entrenamientos sanitarios organizados por el Servicio Militar de Mujeres ZWZ-AK. También asistían a cursos en locales privados, donde médicos enseñaban conocimientos especializados.

Las jóvenes adquirían simultáneamente habilidades teóricas estudiando manuales y directrices sobre temas como: ejercicios sanitarios, técnicas de transporte de heridos, establecimiento de hospitales auxiliares, puntos de rescate y enfermerías. También aprendían sobre diferentes tipos de medicamentos, métodos y técnicas de cuidado de heridos y organizaban el equipamiento personal. Además, recolectaban suministros sanitarios, herramientas quirúrgicas, vendajes y medicamentos.

Los entrenamientos sanitarios se realizaban en todos los distritos del Distrito de Varsovia del Ejército Nacional. En Mokotów, en el V Distrito del AK, las enfermeras preparaban o participaban activamente en la organización de puntos de rescate y atención sanitaria, hospitales de campaña y pequeños hospitales hasta el estallido del Levantamiento de Varsovia. Para la hora «W» del 1 de agosto de 1944, las enfermeras del V Distrito del AK Mokotów estaban bien preparadas.

En los hospitales tomados por los insurgentes, como el de las Hermanas de la Caridad en la calle Goszczyńskiego o el Instituto Nacional de Higiene en Chocimska, proporcionaban activamente ayuda a los insurgentes heridos y a la población civil. En el Regimiento AK «Baszta» y otras unidades de Mokotów, funcionaban patrullas sanitarias preparadas para rescatar a los heridos del campo de batalla. Las jóvenes llevaban bolsas sanitarias y camillas. La asistencia a los heridos se realizaba en condiciones difíciles, bajo fuego y bombardeos aéreos. A menudo, las enfermeras también se convertían en víctimas, resultaban heridas o perdían la vida.

Preparado por: Julian Borkowski, Museo de la Ciudad Capital de Varsovia

UNA DIRECCIÓN EXTRAORDINARIA – RACŁAWICKA 7

La dirección del edificio donde se encuentra el mural es especial, ya que está inscrita en la historia de una familia. Comienza en 1913, cuando Aleksander Kałasa obtuvo el diploma de maestro panadero, y en 1932 abrió la panadería familiar «Kuracyjna» en la calle Racławicka 7, donde empleaba a 15 personas. Durante años, se horneaba pan artesanalmente, exclusivamente con recetas tradicionales con masa madre o levadura.

Durante la ocupación, el propietario construyó un almacén subterráneo que podía almacenar hasta 60 toneladas de harina, que también servía como refugio. Cuando estalló el Levantamiento de Varsovia, Tadeusz Kałasa, hijo del fundador, tenía el almacén lleno, lo que le permitió hornear pan para el ejército durante los siguientes dos meses. Cuando a mediados de septiembre la harina comenzó a escasear, los residentes la traían por las noches en bolsas de cinco o diez kilogramos desde almacenes alemanes abandonados en la calle Podchorążych, para continuar horneando pan. El 27 de septiembre de 1944, con la capitulación de Mokotów, los alemanes expulsaron a la familia Kałasa. En los hornos aún había pan caliente.

El 31 de octubre de 1990, Tadeusz Kałasa recuperó la empresa, y en 1992 la Oficina del Distrito de Mokotów devolvió la propiedad. La panadería «Kuracyjna» operó hasta 2020, y los recuerdos de sus productos excepcionales perduran hasta hoy.

Las historias del distrito y la dirección Racławicka 7 están estrechamente entrelazadas. Son relatos de personas heroicas, de su ética laboral, valentía, amistad y compromiso. Por ello, el inversor, la empresa Syrena Invest, que influyó en el nuevo carácter de este lugar, decidió cuidar la memoria de los anteriores propietarios y su compromiso social, así como honrar el sacrificio de las enfermeras de Mokotów del Levantamiento de Varsovia a través del mural y la transmisión de información histórica.

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